Cupcakes terroríficamente sin gluten

Lo sé, son un pelín gores. Pero no me digáis que de cara a Halloween no son perfectos! Si tenéis el estómago sensible o sencillamente los queréis para otra ocasión, no dejan de ser un cupcakes sin gluten de vainilla decorados con una buttercream de fresa y un coulis de frambuesa como "efecto especial de sangre" así que decorando de otra manera los adaptamos en un momento y están igual de buenos.

Ingredientes para los cupcakes:

• 66 gramos de harina de arroz
• 34 gramos de Maizena
• 1 cucharadita de levadura tipo Royal
• 100 gramos de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
• 110 gramos de azúcar
• 2 huevos
• 2 cucharadas de leche
• 1 cucharadita de esencia de vainilla

Preparación:

Batimos la mantequilla junto con el azúcar enérgicamente hasta que blanquee la mezcla. Una vez hecho esto, vamos añadiendo los huevos uno a uno, integrando completamente el primero antes de añadir el segundo.

Tamizamos la harina junto con la Maizena y la levadura y añadimos la mitad a la mezcla anterior, batiendo despacio hasta que quede homogéneo. En este punto añadimos la leche junto con la esencia de vainilla y mezclamos antes de añadir el resto de la harina. Mezclamos despacio primero para que no salpique la harina y luego ya normal hasta conseguir una mezcla uniforme.

Rellenamos las cápsulas hasta la mitad y metemos en el horno precalentado a 180 grados unos 18 minutos o hasta que al pinchar con un palillo salga limpio. Dejamos enfriar en una rejilla

Ingredientes para la buttercream de fresa:

• 150 gramos de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
• 150 gramos de azúcar glas
• 70 gramos de mermelada de fresa

Preparación:

Hacer una buttercream es muy muy sencillo así que mezclamos con unas varillas eléctricas a velocidad baja la mantequilla junto con la mermelada. Cuando esté mezclado, añadimos el azúcar y seguimos batiendo hasta que esté todo bien integrado. Metemos en una manga pastelera con una boquilla redonda lisa (si no queréis esta decoración, podéis usar la que queráis) y la reservamos en la nevera hasta que coja algo de consistencia.

Ingredientes para el coulis de frambuesa:

• 250 gramos de frambuesas
• 750 gramos de azúcar
• 50 milílitros de agua

Preparación:

Cocemos en un cazo todos los ingredientes durante 20 minutos removiendo de vez en cuando. Una vez cocido, trituramos, colamos y a la nevera a enfriar.

Por último, solo nos queda decorar nuestros cupcakes. Para ello cogemos cada uno y con la manga pastelera vamos poniendo ondas de buttercream, primero en una mitad y luego en la otra. Para finalizar, solo nos queda pintar o salpicar con el coulis para dramatizar más el efecto y como consejo, si vais a utilizar una brocha mejor meter antes en la nevera los cupcakes con la buttercream para que haya endurecido y no se marquen los brochazos.

Huesos de Santo

Cada vez nos inundan más las costumbres de fuera y un clarísimo ejemplo es Halloween. Yo soy el primero, que conste, porque me encantan todas estas pijadetas de adornar la casa, que las peques se disfracen... Pero también es verdad que tenemos tradiciones muy nuestras que no debemos perder y que además están riquísimas, como son estos Huesos de Santo. Realmente son muy fáciles de hacer y lo único que necesitas es tiempo y paciencia para darles forma. Yo los he rellenado de chocolate aunque lo más tradicional sea una crema de yema, pero eso ya a gustos.

Ingredientes:

• 250 gramos de almendra molida
• 200 gramos de azúcar
• 100 milílitros de agua
• Azúcar glas
• 300 gramos de chocolate negro
• 150 gramos de nata para montar

Preparación:

Lo primero que haremos será el mazapán y para ello necesitaremos poner en un cazo el agua junto con el azúcar para hacer un almíbar ligero. Lo mantendremos en el fuego hasta que llegue a 100 grados y lo volcaremos caliente sobre la almendra. Con una cuchara de madera para no quemarnos iremos mezclando hasta que la podamos manejar con la mano, momento en la que lo volcaremos sobre la mesa espolvoreada con azúcar glas y la amasaremos con la mano hasta obtener una masa lisa. Dejamos reposar al menos una hora.

Mientras reposa el mazapán podemos comenzar a realizar el ganaché de chocolate. Para ello troceamos el chocolate en un bol y ponemos a calentar la nata. Cuando ésta llegue a hervir la vertemos sobre el chocolate y movemos con unas varillas suavemente. Al principio será una mezcla muy heterogénea pero poco a poco veremos que se forma una crema de chocolate lisa y brillante. Rellenamos una manga pastelera con boquilla de relleno y la metemos en la nevera para que coja cuerpo y podamos rellenar luego sin que se nos escurra.

Estiramos el mazapán con un rodillo a un grosor de 4 milímetros y cortamos tiras de 5 centímetros de ancho. Si queremos, con una brocheta podemos marcarla longitudinalmente para hacerles los tradicionales surcos pero como veis, yo los dejo lisos. Una vez tengamos las tiras de 5 centímetros las cortamos también a 5 centímetros, haciendo cuadrados y enrollándolos sobre sí mismos (yo me ayudo con una pajita de refresco).

Una vez hechos los "huesos", solo nos queda rellenarlos de la crema que queramos y en nuestro caso de la ganaché que tenemos reservada en la nevera.

Pan de garbanzo y sarraceno para el Día Mundial del Pan

Hoy 16 de octubre es el Día Mundial del Pan. Hace unos días que ando un poco mal de tiempo y creía que no iba a poder ninguna receta para hoy porque precisamente para hacer pan tiempo... no hay que ir justo. Pero mira, encontré una receta con bastante poco tiempo de levado y que no da demasiado trabajo, además de que no utilizaba ningún mix comercial así que tiré de arsenal de harinas y aquí está! La miga se queda bastante compacta pero esponjosa por lo que no son de los que se quedan atravesados y además sin tostar está realmente bueno por lo que también es un punto muy positivo.

Ingredientes:

• 125 gramos de harina de garbanzo
• 100 gramos de harina de arroz
• 50 gramos de harina de trigo sarraceno
• 125 gramos de fécula de mandioca dulce
• 125 gramos de fécula de patata
• 12 gramos de sal 
• 20 gramos de azúcar
• 10 gramos de xantana
• 2 sobres de levadura seca de panadero (11 gramos)
• 3 huevos
• 430 milílitros de agua mineral
• 30 milílitros de aceite de oliva
• 5 milílitros de vinagre de sidra

Preparación:

Lo primero de todo decir que la masa la hice en la amasadora porque no se queda demasiado compacta y con las manos sería algo complicado. Hecha esta apreciación, poner el agua junto con el aceite, los huevos y el vinagre en la amasadora y mezclarlo bien.

Aparte en un bol, echar las 3 harinas junto con la féculas, la sal, el azúcar, la xantana y la levadura y mezclar bien hasta que se quede un aspecto homogéneo.

Echamos los ingredientes secos en los líquidos y los amasamos a velocidad suave unos tres minutos o hasta que veamos una masa totalmente uniforme (insisto, no queda compacta para nada).

Pasamos la masa a un molde rectangular engrasado de unos 24 ó 26 centímetros (yo usé uno de 25 que tengo de Lekué) y con las manos mojadas alisamos la superficie. Tapamos con un trapo seco y dejamos que leve unos 30-40 minutos a temperatura ambiente o hasta que veamos que ha doblado más o menos su volumen.

Horneamos en horno precalentado a 180 grados unos 35 minutos y cuando lo saquemos del horno lo intentamos desmoldar lo antes posible para evitar que se humedezca, poniéndolo sobre una rejilla para que se termine de enfriar.

Kétchup casero

Antes de nada una curiosidad que os va a dejar, cuando menos, sorprendidos. ¿Sabíais que el origen de esta salsa es el "ketsiap" y que ésta era una salsa china picante que acompañaba el pescado y la carne pero que no incluía el tomate entre sus ingredientes? Kétchup sin tomate... ¡ahí queda eso!. Una vez conocido este dato y que os va a valer seguramente muchísimo para los concursos de la televisión, debo decir que esta receta es un mix de varias que he ido recopilando por la red y que he adaptado a mis gustos (¿se nota que me gustan las especias verdad?). Con ella, podréis controlar muy bien lo que estáis comiendo y lo que es mas importante para mi, sé seguro que de gluten, ni rastro!

Ingredientes:

• 1 kilo de tomates sin piel ni pepitas
• 400 gramos de cebolla roja
• 1 diente de ajo
• 50 gramos de jengibre fresco picado
• 20 gramos de sal
• 280 gramos de manzana verde limpia de piel y pepitas
• 50 gramos de azúcar moreno (o 25 gramos de miel)
• 70 milílitros de vinagre de manzana
• 1/2 cucharadita de pimentón dulce
• 1/2 cucharadita de mostaza molida
• 1/2 cucharadita de cilantro molido
• 1/4 cucharadita de canela molida
• 1/4 cucharadita de clavo molido
• 1/4 cucharadita de nuez moscada molida
• 3 granos de pimienta de Jamaica molidos

Preparación:

Pelamos primero los tomates y les quitamos las pepitas. Para facilitar esta tarea podemos primero escaldarlos en agua hirviendo. Molemos también todas las especias que tengamos en grano y las reservamos.

Sofreímos la cebolla cortada en trozos junto con el jengibre fresco y el ajo con la mitad de la sal. Incorporamos el tomate cuando empiece a estar la cebolla transparente y lo hacemos a fuego suave durante cuarenta minutos.

Trituramos el tomate y volvemos a llevar al fuego junto con todas las especias molidas, el azúcar (o miel), el vinagre y la manzana limpia y cortada en dados pequeños. Si la manzana fuera muy dura se podría incorporar en el primer paso para que se pueda hacer sin problemas. Ponemos a fuego muy suave durante unos sesenta minutos o hasta que haya espesado lo suficiente. En este paso tendremos que estar removiendo constantemente para evitar que se pegue. Rectificar la sal si es preciso y al final triturar de nuevo si la manzana no se ha deshecho todavía.