martes, 29 de marzo de 2016

Brownie de café con ganaché de naranja


Reconozco que nunca me había dado por hacer brownies. Tenía una idea preconcebida o algo así y no me llamaba demasiado pero después de algún que otro tuneo y complemento, creo que esta receta va a ser una de las fijas dentro de mi repertorio. Eso sí, pura mantequilla así que olvídate de la operación bikini que con esto en tu dieta... me da que no llegas!

Ingredientes:
  • 240 gramos de mantequilla a temperatura ambiente
  • 225 gramos de azúcar moreno
  • 3 huevos
  • 8 gramos de café soluble
  • 2 cucharadas de pasta de vainilla
  • 180 gramos de harina Schär Mix Dolci
  • 105 gramos de cacao en polvo

Ingredientes para la ganaché:
  • 300 gramos de chocolate blanco
  • 130 milílitros de nata
  • La ralladura de una naranja
  • 1 rama de canela

Preparación:

Primero preparamos el molde y para ello lo forramos con papel de horno y pincelamos con mantequilla derretida. Yo utilicé una barra de mantequilla de 250 gramos para toda la receta por lo que los 10 que sobraban los metí en el microondas unos segundos y con un pincel unté bien todo el molde. En un bol aparte tamizamos la harina con el cacao y lo reservamos.

Mezclar la mantequilla a temperatura ambiente junto con el azúcar y lo batimos hasta que quede una mezcla homogénea. Añadimos después los huevos, la pasta de vainilla y el cacao soluble y lo mezclamos bien.

A esta mezcla anterior añadimos la harina con el cacao en tres tandas para que se incorpore bien y no queden grumos. Volcar sobre el molde y con una espátula repartir bien ya que es bastante densa y por si sola no llega a los rincones.

Hornear en el horno precalentado a 180 grados durante 25 minutos. Lo sacamos del horno una vez ha pasado el tiempo y cuando empiece a templar lo sacamos del molde.

Mientras se enfría del todo, vamos a hacer la ganaché de chocolate blanco. Para ello, ponemos en un cazo la ralladura de una naranja junto con la canela y la nata y lo llevamos todo a ebullición. Cuando comience a hervir, retiramos la canela con cuidado de no quemarnos y lo volcamos sobre el chocolate que lo tendremos previamente troceado. Mezclamos bien con unas varillas hasta que quede una mezcla lisa y homogénea y esperamos a que temple un poco para que coja consistencia. Mientras tanto, abrimos por la mitad el brownie y ponemos una capa generosa.

lunes, 7 de marzo de 2016

Tarta de mousse de fresa


Reconozco que si hay una fruta que me encanta es, junto con el melocotón, la fresa. Si no contamos la elaboración del bizcocho de la base, esta tarta no necesita horno para nada y si estamos un poco vaguetes, podemos comprar la base hecha ya o bien sustituirla por una de galletas y mantequilla. Para la decoración de encima he utilizado virutas de chocolate que he hecho en el momento raspando con un cuchillo una tableta de chocolate pero podemos poner cualquier cosa que se nos ocurra. Además, esta tarta es mi segunda opción para el I Concurso de recetas para blogueros "Fresas de Europa" que organiza la web www.fresasdeeuropa.com después de haber participado ya con el fresamisú.

Ingredientes:
  • Una base de bizcocho genovés aromatizado con dos cucharadas de té matcha
  • 150 gramos de chocolate
  • 100 milílitros de nata para montar
  • 500 gramos de fresas
  • 250 gramos de queso mascarpone
  • 200 gramos de azúcar
  • 500 milílitros de nata para montar
  • 9 hojas de gelatina neutra

Preparación:

Para empezar vamos a preparar el molde y la base. Para ello cogemos el molde y lo apoyamos sobre la plancha de bizcocho para que nos sirva de plantilla, recortándolo con un cuchillo. Una vez cogida la forma que queramos la introducimos en el fondo del molde y la presionamos bien con la mano. Después hacemos una ganaché de chocolate con el chocolate y los 100 milílitros de nata. Troceamos primero el chocolate en trozos pequeños y los ponemos en un cuenco. Llevamos la nata a ebullición y justo cuando rompa a hervir la vertemos sobre el chocolate, moviendo con unas varillas hasta que quede una mezcla lisa y uniforme. Aún en caliente, ponemos la ganaché sobre la base de bizcocho, con cuidado de repartirla bien y lo reservamos en la nevera mientras hacemos el resto de la tarta.

Limpiamos y troceamos las fresas y las ponemos junto con el azúcar a macerar durante dos horas. Pasado ese tiempo las pasamos a un cazo y las llevamos a ebullición durante unos diez minutos. Después desespumamos con una cuchara y trituramos todo con la batidora. Aún en caliente, añadimos las hojas de gelatina escurridas que habremos hidratado previamente durante cinco minutos en agua fría. Lo haremos siempre de una en una y removiendo bien antes de añadir la siguiente.

Cuando la mezcla anterior ya esté templada añadimos el mascarpone y removemos hasta que quede una masa homogénea y bien mezclada. Reservamos hasta que se enfríe de todo.

Montamos la nata muy compacta con unas varillas eléctricas y para ello es muy recomendable que tanto la propia nata como el recipiente donde la vamos a montar estén bien fríos. Una vez montada, la añadimos a la mezcla de las fresas y el queso y lo mezclamos todo con movimientos envolventes ayudándonos de una espátula.

Para finalizar, volcamos toda la mezcla dentro del molde desmontable y alisamos toda la superficie con una cuchara o espátula. Llevamos a la nevera hasta que cuaje (mejor una noche entera en la nevera) y la decoramos al gusto. Un truco para desmoldarla sin problemas es pasar un cuchillo afilado entre la tarta y el molde por todo el contorno.

domingo, 6 de marzo de 2016

Bizcocho genovés


Esta es una de esas recetas, al igual que por ejemplo el azúcar invertido, que por si mismas igual no dicen demasiado pero que nos van a servir como base para elaboraciones más complejas. El caso del bizcocho genovés nos servirá para hacer brazos de gitano o como base o capas de otras tartas. Para los brazos de gitano habrá que enrollarlo en caliente y para ello hay que cubrirlo con un paño húmedo y enrollarlo para que coja la forma conforme se vaya enfriando y para otras elaboraciones, esperando a que se enfríe lo cortaremos al tamaño y forma que más nos interese. También tiene algo de bueno y es que añadiendo un par de cucharadas de cacao (o té matcha como es el caso de la foto) podemos variar el sabor de una manera sencilla.

Ingredientes:
  • 75 gramos de harina de arroz
  • 50 gramos de almidón de maíz
  • 100 gramos de azúcar glas
  • 4 huevos
  • Mantequilla para engrasar

Preparación:

Primero tendremos que coger los huevos y separar las claras de las yemas. Después blanqueamos las yemas con la mitad del azúcar y las reservamos.

Ahora cogemos las claras y las batimos a punto de nieve. Cuando casi estén listas añadimos el azúcar restante y las seguimos montando hasta que tengan una textura bastante densa. La textura ideal es la de "moco de pavo" y no es otra que cuando saquemos las varillas las claras no se lleguen a caer y se queden un poco colgando.

A las claras montadas añadimos las yemas con el azúcar muy despacio mezclando con movimientos suaves y envolventes para que no se bajen. Una vez hecho, vamos añadiendo las harinas mezcladas y tamizadas (y si queremos añadir cacao u otra cosa, que esté también junto con las harinas) y mezclando de la misma manera.

Para terminar, ponemos un papel de horno en una bandeja (con estas cantidades da sin problemas para una bandeja de horno habitual) y lo engrasamos con mantequilla. Volcamos la mezcla y con una espátula la repartimos de manera uniforme para que se quede un bizcocho fino y con el mismo grosor por todo. Horneamos durante 10 minutos en horno precalentado a 180 grados y lo sacamos a una rejilla (sin quitar el papel) para que se enfríe.