Después de un primer experimento en el que por culpa de las cantidades casi se va toda la masa derretida por el horno, os traigo esta receta puramente navideña en la que por fácil, si hay niños en la casa podrán ayudar y seguro que se lo pasan fenomenal. ¡Probad y os sorprenderá!
Ingredientes:
- 375 gramos de harina
- 190 gramos de manteca de cerdo
- 50 gramos de almendra molida
- 160 gramos de azúcar glas
- 3 gramos de bicarbonato sódico
- 1/2 cucharadita de canela
Preparación:
Lo primero que tendremos que hacer es tostar la
harina y la almendra molida en el horno. Lo ideal sería utilizar dos
bandejas diferentes pero como la almendra es poca cantidad se puede
hacer en la misma. Para ello, extendemos bien todo en una bandeja de
horno y la metemos dentro habiéndolo precalentado a 170 grados. Con
unos diez minutos, removiendo cada dos ó tres, estará hecha y eso
se verá en que va cogiendo un ligero color. Dejar enfriar después
completamente.
Ahora cogemos la manteca, que tendremos a
temperatura ambiente para poderla trabajar, y la mezclamos con el
azúcar. A continuación se añade la harina que hemos tostado, la
almendra, el bicarbonato y la canela. Amasamos bien hasta que se
quede un masa homogénea y hacemos una bola. La tapamos con un paño
y la dejamos reposar durante unos veinte minutos.
Después del reposo la estiramos uniformemente sobre
una superficie lisa con un grosor de aproximadamente un centímetro.
Con un cortapastas vamos sacando los polvorones y los ponemos sobre
una bandeja de horno cubierta con papel sulfurizado o lámina de
teflón.
Por último, hornear solo con calor por arriba a
180ºC entre 10 y 15 minutos, vigilando bien porque se tuestan muy
rápido y cuando estén listos sacarlos para espolvorearlos con
azúcar glas por encima.