Para un desayuno, para una merienda... no sé si hay muchas cosas tan versátiles como las magdalenas! Me pasaron esta receta casi por casualidad de la Asociación Aragonesa de Celíacos y sinceramente, me ha sorprendido gratamente porque es muy fácil y los resultados saltan a la vista, ni cuando las hacía con gluten me salían tan bien! esponjosas, con copete... vamos, una delicia! La proporción aceite de oliva y girasol se puede adaptar tranquilamente ya que el de oliva aporta más sabor e igual no a todo el mundo le gusta.
Ingredientes:
- 60 gramos de maizena
- 65 gramos de harina Schär Mix B
- 125 gramos de azúcar
- 3 huevos
- 50 mililítros de nata
- 100 mililítros de aceite de oliva
- 25 mililítros de aceite de girasol
- 8 gramos de levadura
Preparación:
Mezclar los huevos junto con el azúcar hasta que blanquee la mezcla y añadir entonces la nata para que se quede una mezcla ligera y homogénea.
Añadimos las harinas junto con la levadura e integramos bien para que no queden grumos. Añadir entonces el aceite. Quedará ua mezcla muy ligera pero no debe preocuparnos.
Llenamos los moldes hasta dos tercios y los metemos en el horno precalentado a 170 grados con calor arriba y abajo. Entre 15 y 20 minutos después las magdalenas estarán listas aunque como esto depende en gran parte del horno utilizado, a partir del minuto 15 habrá que controlarlas para que no se nos quemen.
Una receta muy rica
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